Este blog forma parte del proyecto narrativo Cuéntalo Todo, bajo la dirección del maestro Sandro Cohen dentro de la materia Redaccion Universitaria del Departamento de Humanidades, División de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma Metropolitana - Azcapotzalco.

martes, 20 de noviembre de 2012

la noticia


Estoy muy preocupada. Aún no sé nada de Israel. Debió haber regresado hace dos semanas. Tal vez se tenía que quedar más tiempo. Solo espero que él esté bien. He escuchado en las noticias que ha habido muchos enfrentamientos en Tamaulipas entre militares y narcos en los cuales ha habido muchos militares muertos. ¿Y si le pasó algo? Es la primera pregunta que viene a mi cabeza y eso hace que me preocupe aún más.
Escucho que tocan la puerta. Me levanto del sillón y me dirijo a abrir. Para mi sorpresa es la mamá de Israel. Su cara es de desconcierto, tristeza, confusión… Observo que esta llorando.
¾¿Se encuentra bien? ­­ ¾le pregunto tomándola del brazo.
¾No  ¾responde sollozando.
¾¿Qué es lo que sucede? Es mejor que pase y se siente.
¾No, aquí estoy bien. Lo que te diré será muy breve.
¾Si, dígame ¿Qué es lo que está pasando.
¾Israel, esta muerto.
Sentí como un aire frío recorría mi cuerpo. No podía creer lo que su mamá estaba diciendo. Me quedé estupefacta.
¾¡No es cierto! ¡Eso no puede ser! ¿Pero…? ¿Cómo fue que sucedió? ¿Cuándo…?
¾No lo sé ¾fue lo último que respondió.
Mis lágrimas empezarón a rodar por mis mejillas. De pronto su mamá me abrazó aunque ella estaba anímicamente peor que yo. Cuando termino de abrazarme se fue y yo me entre a mi casa para cambiarme de ropa. Todo el día me la pase llorando. Aún no podía asimilar lo qué estaba sucediendo. Sabía que algún día pasaría esto pero nunca pense que iba a  ser tan rápido.Su trabajo de militar lo llevaría a la muerte.
Eran las 2:30 horas y todavía no entregaban el cuerpo de Israel. Ya todo se encontraba listo para su funeral. El cuerpo llegó a las 3:45 horas. Lo primero que su familia hizo fue cambiarlo de ropa y acomodarlo en la caja para que la gente se despidiera de él.
Llegó el momento para que yo me despidiera de Israel. Me fui acercando poco a poco hasta donde se encontraba. Al verlo ahí dentro de esa horrible caja no pude evitar las ganas de abrazar la caja y preguntarle ¿Por qué te fuiste sin mí? ¿Por qué me dejaste?.
Mi madre se acerco a mí y me dijo: “Cálmate, yo sé que no es fácil pero debes tranquilizarte”. Mi mamá tenía razón necesitaba tranquilizarme, pero en mi mente se pregunta qué si no sabían el dolor qué estaba sintiendo. Ni siquiera se imaginaban  todo lo que estaba sufriendo. El sepelio fue a las 13 horas. Siento que mi vida ya no tiene sentido sin él.
Ya ha pasado un año desde la muerte de Israel. Cada sábado voy a su tumba a dejarle flores y allí parada me hago la misma pregunta de siempre ¿Por qué tuvo que ser él?.


lunes, 12 de noviembre de 2012

¿Vacaciones?

Me pongo a escuchar música en mi cuarto y no me di cuenta en qué momento me quedé dormida.Después de dos horas me despierto sobresaltada debido al sueño tan horrible que tuve. Me siento en la cama y trató de olvidarlo. Me pongo a pensar en que todos mis problemas se están solucionando aunque todavía me sigo sintiendo mal. Lo bueno es que ya falta poco para las vacaciones y podré  descansar.

Después de un rato me dispongo a comer algo.Bajo las escaleras, voy a la cocina y reviso que hay de comer. Hay chuletas en chipotle. Me sirvo y me pongo a comer deprisa, ya que aún tengo muchísima tarea por hacer y ya no quiero seguir desvelándome. Al terminar de comer, me dirijo hacia la sala para hacer mi tarea. Son las siete de la noche y escucho como se abre la puerta. Es mi mamá, ya se encuentra bien y de nuevo esta trabajando. Al verla entrar me doy cuenta de que viene demasiado cansada, se va directo al sillón y se recuesta. Se queda dormida y trato de hacer el menos ruido posible. De nuevo me voy a dormir tarde.

Han pasado varios días y ya solo faltan tres para salir de vacaciones. Se que en las vacaciones tendré más tiempo de estar con Israel ya que no lo he visto. No hemos estado juntos durante un buen tiempo. Necesitamos estar solos. Necesitamos revivir esos momentos de placer que ya no hemos tenido. Tengo tantas ganas de estar con él que lo único que me queda es esperar a que él regrese.

 Son vacaciones y estoy en mi casa, pensé que sería para descansar pero no es así: tenemos que hacer limpieza de toda la casa. Creo que este descanso tendrá que esperar por lo menos tres días más.El domingo por poco y me caigo de las escaleras, se me nubló la vista pero afortunadamente no paso a mayores solo me torcí el tobillo. La vista me está fallando un poco y los ojos últimamente se me están poniendo rojos. Tengo que ir a la óptica, pero creo que será mañana.

Fui a la óptica y eso de que se me nubla la vista es porque necesito lentes. No es mucha la graduación pero aun así los necesito ¿Cómo me veré con lentes? ¿Me veré rara? Esas preguntas vienen a mi cabeza.

Estoy acostada en mi cama y vibra mi celular. Un mensaje nuevo. Es Israel. Me dice que regresa en tres días y que pasaremos un día inolvidable. Quiero que estos días se pasen muy rápido. Ya quiero verlo. Ya quiero estar con él. Ya quiero sentir su cuerpo. Quiero estar entre sus brazos. Quiero que me acaricie y me bese solo como él sabe hacerlo.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Quiero descansar

 Me encuentro en mi habitación tratando de descansar un poco pero, como me dejaron mucha tarea, no puedo quedarme acostada más tiempo. Tengo que lidiar con muchos problemas y siento que no encuentro solución para todos ellos. 

Los días que mi mamá estuvo hospitalizada me parecieron muy largos: tuve que pedir permiso para faltar al trabajo porque  iba a visitar a mi mamá. Cuando por fin la dieron de alta, me sentí más tranquila al ver que estaba fuera de peligro. Ya se encuentra en casa y sólo tiene que descansar por una semanas. 

Apenas resolví un problemas y enseguida viene otro: mi abuela paterna quiere desalojarnos de la casa donde vivimos. Según ella, mi mamá y yo no tenemos derecho a seguir ahí. Mi padre no vive con nosotras. No me quedó más remedio que hablarle a mi papá y decirle lo que estaba pasando. No me gustó hablar con él pero tuve que hacerlo. Mi abuela solo le hace caso a su hijo y por eso confió en que él pueda solucionarlo. Hasta entonces, sólo puedo seguir cuidando de mi mamá. 

Estos días siguen siendo muy agobiantes porque, con el trabajo y la escuela, casi siempre tengo sueño. Todo el tiempo me siento cansada y mi madre depende de mí, pero lo peor de todo son los chismes que inventa mi abuela... ¡Odio que nos haga esto! ¡La odio a ella! ¿Cuándo dejara de criticarnos? ¡Quiero que nos deje vivir en paz! 

Suena el teléfono y, como mi madre está dormida, me levanto de la cama y contesto en la sala: es mi papá. Dice que ya hablo con mi abuela y que ella nos dejara tranquilas. Parece que él ya lo solucionó. Pienso decirle  ¡Vaya! Hasta qué haces algo...  Pero solo digo: Gracias, papá. Y cuelgo el teléfono sin despedirme.  Hay veces que ya no quisiera tener contacto con el porque  no merece que lo llamé padre. Nunca se hizo responsable de mí y aún así, mi mamá  me pide que lo respete y lo llame papá. Para mí es aquel señor. Vuelvo a mi habitación pensando en que tengo un problema menos... 

Últimamente me he sentido mal. Tal vez sea el estrés y el sueño. No quiero enfermarme. ¡No en estos momentos! ¡Tengo mucho que hacer y ya se acercan los exámenes!  Hay noches en la que no duermo y,  aún más que nunca, debo de seguir estudiando y trabajando. 

Me he concentrado tanto en mis deberes y en cuidar a mi mamá, que no he visto a  Israel.  El único contacto que tenemos es por teléfono y mensajes de texto. Sabe muy bien como me siento y se preocupa por mí, pero su trabajo le impide venir a vernos -también esta preocupado por la salud de mi mamá-. Aunque sus llamadas son cortas, él alegra mi vida con sus palabras de amor. Siempre me dice ¡Te amo!   Solo espero que me vaya bien en los exámenes y que todo este tormento acabe pronto.